Alza en maíz, tan solo un suspiro

Alfonso Garcia Araneda

Opinion

Opinión   Alfonso García Araneda

Al cierre del viernes, los futuros a diciembre de maíz que cotizan en la Bolsa de Chicago se ubicaron en niveles de 167.02 dólares por tonelada, lo que significó un muy buen avance del 1.13% en la sesión; sin embargo, lejos de echar las campanas al vuelo, esta alza significa tan solo un suspiro ante el complicado panorama que enfrentan los productores en el presente ciclo debido a diversos factores que apuntan a que la tendencia del maíz se podría mantener a la baja.

En primer lugar habría que resaltar la enorme cantidad de maíz que hay en el mercado. Hace apenas unos días, el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) emitió su reporte sobre inventarios trimestrales, en el cual nos mostró que en el caso del maíz, estos eran de 126.83 millones de toneladas al 1 de junio versus los 104.22 millones que había en el mismo periodo del año pasado.

Lo anterior de inmediato detonó ventas por parte de los fondos (especuladores) que dejaron muy en claro que no les preocupa en lo absoluto estar cortos (vendidos) en el maíz ya que ese mismo día vendieron 86,000 contratos más, para llevar su posición vendedora a 278,000 contratos. Lo anterior significa que los fondos apuestan claramente a la baja en los precios del maíz.

Tan solo para que se den una idea, cada contrato de futuros de maíz ampara 127.01 toneladas métricas, por lo que una posición vendedora como la que se alcanzó el día del reporte del USDA equivale a que los fondos han vendido maíz por 35.31 millones de toneladas anticipando las caídas de precios que visualizan se pueden dar. Lo anterior es sin duda muy superior a lo que produce México en un año.

Para agregar leña a la hoguera habría que tomar en consideración que la producción estimada por el USDA para el maíz en Estados Unidos este ciclo 24/25 es del orden de 377.46 millones de toneladas, la tercera más grande en los últimos 14 años; sin embargo, debido a la desaceleración económica y en consecuencia a una menor demanda, el USDA está estimando inventarios finales del orden de 53.39 millones de toneladas, muy similares a los del ciclo 17/18, en el que vimos al maíz bajo fuertes presiones, pero esto no queda ahí, hay un indicador que se sigue en los mercados que marca la pauta de los precios y es la razón de inventarios a uso, la cual resulta de dividir los inventarios finales entre el consumo total.

Mientras más elevado sea el porcentaje resultante, significa que habrá proporcionalmente mayores inventarios y viceversa.

Lo anterior nos permite comparar el nivel de inventarios y consumo versus otros años, y para este ciclo se ubica según el USDA en 14.2%, casi igual que el del ciclo 17/18 que ya comentábamos.

Por su parte, el mercado también da un seguimiento estrecho al clima en esta etapa del cultivo, ya que entre julio y agosto se da la polinización, lo que determina si habrá buenos rendimientos o no.

En caso de haber temperaturas elevadas y falta de humedad, es muy probable que los rendimientos se vean disminuidos; sin embargo, el clima en este momento más bien se ha mostrado húmedo en la franja maicera de Estados Unidos, e inclusive en algunas áreas ha sobrado agua, por lo que se espera que el clima solo sea un factor benéfico para el cultivo.

Para sumar a la inercia bajista, la soya y el trigo se encuentran en una situación similar al maíz, así que las bajas de uno, alimentan las bajas del otro.

Finalmente, y a pesar de las alzas del viernes, es importante saber que el contrato a diciembre del maíz que cotiza en Chicago ha caído en lo que va del año 8.52% y de su nivel máximo alcanzado el 13 de mayo, ha retrocedido 10.21 por ciento.

Amigos productores, el tipo de cambio seguirá mostrando volatilidad y podría ayudar un poco, pero de ninguna manera compensará las fuertes caídas en el maíz que hemos observado y que se pueden seguir dando. Hay que administrar los riesgos.